LO TRIBUTARIO (nº 500)

Procedimientos tributarios (10): comprobación de valores (1)

La tantas veces confusa distinción entre funciones, actuaciones y procedimientos (cf. arts. 117, 141 y 160; arts. 142, 148, 151, 153; arts. 123 a 140, 145-159, 163 a 173) se manifiesta una vez más en el “procedimiento” de comprobación de valores (arts. 134 y 135 LGT) que tiene fijado un plazo de duración (art. 104 LGT) y que se debe distinguir de las “actuaciones” de comprobación de valores” (art. 57 LGT) que se pueden producir en el desarrollo de otro procedimiento, que tiene su propio plazo de duración. En cambio, tanto en el procedimiento como en la actuación no cabe impugnar la valoración (art. 134.3 LGT) sino al tiempo de impugnar el acto de regularización tributaria.

- Establece el artículo 134 LGT que la Administración puede efectuar la comprobación de valores aplicando los medios previstos en el artículo 57 LGT, salvo que el administrado hubiera declarado utilizando los valores publicados por la Administración. Esta última posibilidad impide comprobar a la Administración, pero no impide que el administrado se aparte de dichos valores en su declaración, abriendo así plazo a la comprobación administrativa. Esto ocurre, por ejemplo, con la publicación anual de valores de vehículos a efectos del ITP; no ocurre así, con el valor de inmuebles determinado por la Administración a petición de un administrado y que vincula por tres meses a aquélla; y tampoco con los “valores reales asignados” de inmuebles que pudiera publicar la Administración a partir de precios medios de mercado o de valores catastrales porque, como dice el TS (s. 5.6.18) la Administración no goza de presunción de acierto en sus valoraciones o en sus procedimientos ni aunque los apruebe por norma autonómica. La citada jurisprudencia señala también que la comprobación de valores para modificar la declaración del administrado tiene como premisa que la Administración pueda probar que el declarado no se ajusta al verdadero valor.

- El procedimiento se puede iniciar mediante comunicación de la Administración o, si dispone de datos suficientes, mediante la notificación conjunta de la propuesta de liquidación y valoración “motivada con expresión de los medios y criterios empleados” cuando es distinta de la declarada por el administrado. Si no dispone de los medios necesarios la Administración puede continuar iniciado por comunicación notificando a los administradores las actuaciones que precisen de su colaboración. El procedimiento termina con la notificación de la regularización (valor comprobado y, en su caso, liquidación) que se debe producir en el plazo de 6 meses, produciéndose la caducidad del procedimiento si no ocurre así (art. 104.1 y 4.b) LGT).

La valoración por comprobación no es impugnable, pero cabe proponer la tasación pericial contradictoria (art. 135 LGT) que determina la intervención de tres peritos (de la Administración, del administrado y un tercero independiente). Se debe interponer en el plazo del primer recurso o reclamación contra la liquidación o, cuando la normativa así lo prevea, contra el acto de comprobación de valores debidamente notificado. Sólo cuando la norma reguladora del tributo de que se trate así lo prevea, el administrado puede reservarse el derecho a promover la tasación. La solicitud de la tasación o la reserva del derecho a promoverla determina la suspensión de la ejecución de la liquidación y del plazo para interponer recurso o reclamación contra la misma, así como para iniciar (o para concluir, si ya se hubiera iniciado) el procedimiento sancionador.

DE LO HUMANO A LO DIVINO

Según Eurostat, la presión fiscal en España es el 34,5% del PIB; la media europea es el 40%; la deficiencia recaudatoria respecto de la UE es de 70.000 millones de euros.

Cuaresma. El cristiano vive en la misericordia de Dios. Frecuentemente recuerda en su corazón que misericordia es poner el corazón en la miseria, que miseria es lo desechable, lo que ya no vale, lo despreciable. Y sale un salmo del corazón: “Bendice, alma mía, al Señor, y todo mi ser a su Nombre santo. Bendice alma mía, al Señor, no olvides ninguno de sus beneficios. Él es quien perdona tus culpas, quien sana tus enfermedades… El Señor es compasivo y misericordioso, lento a la ira y rico en misericordia. No dura siempre su querella, ni guarda rencor perpetuamente. No nos trata según nuestros pecados ni nos paga según nuestras culpas… Como se apiada un padre de sus hijos, así el Señor tiene piedad de los que le temen. Pues Él conoce de qué estamos hechos, recuerda que somos polvo.” (salmo 103, 1-3. 8-10. 13-14).

Cuaresma. Tiempo de meditación en la confianza de que Dios está aquí, me ve, me escucha y me ama. “Pero, aunque nos hemos rebelado, el Señor, nuestro Dios, es compasivo y perdona” (Dn 9,9). “Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo; no juzguéis y no seréis juzgados; no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados; dad y se os dará: os verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante. La medida que uséis, la usarán con vosotros” (Lc 6,36-38)

Cuaresma. Tiempo de examen de conciencia, de propósito de enmienda, de conciliación. Tiempo de ayudar, de escuchar, de comprender, de callar, de sonreír. “Cesad de obrar mal, aprended a obra bien; buscad el derecho, enderezad al oprimido; defended al huérfano, proteged a la viuda. Entonces, venid y litigaremos -dice el Señor- Aunque vuestros pecados sean como púrpura, blanquerán como nieve; aunque sean rojos como escarlata, quedarán como lana” (Is 1,16-18)

Cuaresma. Tiempo de conversión, de cambiar lo que hay que cambiar y de pedir ayuda a Dios para hacerlo bien y perseverar, porque los humanos somos débiles y fallamos, pero Dios es fiel y nos ama: Dios es Amor. “Así dice el Señor: Maldito quien confía en el hombre, y en la carne busca su fuerza, apartando su corazón del Señor. Será como cardo en la estepa, no verá llegar el bien; habitará la aridez del desierto, tierra salobre e inhóspita. Bendito quien confía en el Señor y pone en el Señor su confianza. Será un árbol plantado junto al agua, que junto a la corriente echa raíces; cuando llegue el estío no lo sentirá, su hoja estará verde; en año de sequía no se inquieta, no deja de dar fruto. Nada más falso y enfermo que el corazón: ¿quién lo entenderá? Yo, el Señor, penetro el corazón, sondeo las entrañas, para dar al hombre según su conducta, según el fruto de sus acciones, para dar al hombre según su conducta…” (Jr 17,5-10)

Cuaresma. Idilio a los pies de la Cruz: “No me mueve, mi Dios, para quererte / el cielo que me tienes prometido, / ni me mueve el infierno tan temido/ para dejar por eso de ofenderte. / Tú me mueves, Señor, muéveme el verte / clavado en esa cruz y escarnecido; / muéveme ver tu cuerpo tan herido; / muévenme tus afrentas y tu muerte. / Tú me mueves, Señor, de tal manera/ que, aunque no hubiera cielo, yo te amara / y aunque no hubiera infierno te temiera. / No me tienes que dar porque te quiera, / pues, aunque lo que espero no esperara, / lo mismo que te quiero, te quisiera” (Anónimo)

LA HOJA SEMANAL
(del 18 al 23 de marzo)

Lunes (18)

San Cirilo de Jerusalén, obispo y doctor de la Iglesia (2ª Cuaresma; nov. San José)
Palabras: “Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo” (Lc 6,36)
Reflexión: No juzguéis, no condenéis, perdonad, dad
Propósito, durante el día: Enséñame, Señor, a ver, a hacer, como lo haces Tú

Martes (19)

San José, patrono de la Iglesia Universal
Palabras: “Cuando José se despertó hizo lo que le había mandado el ángel” (Mt 1,24)
Reflexión: La virgen dará a luz a un hijo y tú le pondrás por nombre Jesús
Propósito, durante el día: Jesús, José, María os doy el corazón y el alma mía

Miércoles (20)

San Juan Nepomuceno, presbítero y mártir (2ª Cuaresma)
Palabras: “El que quiera ser el primero, que sea vuestro esclavo” (Mt 20,27)
Reflexión: El Hijo del hombre ha venido a servir y dar su vida por muchos
Propósito, durante el día: Señor, haz que me esfuerce en servir para servir

Jueves (21)

San Nicolás de Flüe, (2ª Cuaresma)
Palabras: “Había un hombre rico que vestía de púrpura y lino…” (Lc 16,19)
Reflexión: Y un mendigo, Lázaro, echado en su portal, cubierto de llagas…
Propósito, durante el día: Señor, que no tenga nada como propio

Viernes (22)

Santa Catalina de Suecia, virgen (2ª Cuaresma; abstinencia de carne y caldo de carne)
Palabras: “Este es el heredero: venid, lo matamos… (Mt, 21,38)
Reflexión: … y nos quedamos con su herencia”
Propósito, durante el día: Señor, gracias; perdón; ayúdame más

Sábado (23)

Santo Toribio de Mogrovejo, obispo (2ª Cuaresma)
Palabras: “Cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y se conmovió” (Lc 15,20)
Reflexión: No merezco ser llamado hijo tuyo
Propósito, durante el día: ¡La Madre de Dios es mi madre!

(la reflexión y el propósito los fija cada uno, claro)

Las lecturas del día 17, domingo (2º Cuaresma, ciclo C; 7º san José) nos animan a vivir de continuo y confiados en la presencia de Dios: “Aquel día el Señor hizo alianza con Abrán” (Gn 15); “Él transformará nuestro cuerpo humilde, según el modelo de su cuerpo glorioso” (Flp 3); “Maestro, qué bien se está aquí” (Lc 9). Es tiempo de estar frecuentemente ante el Sagrario y decirle a Jesús: Creo que estás aquí, que me ves, que me oyes. Te adoro, te pido perdón, gracia y ayuda, y más fe; dame amor para dar amor.

PALABRAS DEL PAPA FRANCISCO

- “¿Dónde podemos fijar nuestra mirada a lo largo del camino de la Cuaresma? Es sencillo: en el crucifijo. Jesús en la cruz es la brújula de la vida, que nos orienta al cielo. La pobreza del madero, el silencio del Señor, su desprendimiento por amor nos muestran la necesidad de una vida más sencilla, libre de tantas preocupaciones por las cosas. Jesús desde la cruz nos enseña la renuncia llena de valentía. Pues nunca avanzaremos si estamos cargados de pesos que estorban. Necesitamos liberarnos de los tentáculos del consumismo y de las trampas del egoísmo, de querer cada vez más, de no estar nunca satisfechos, del corazón cerrado a las necesidades de los pobres. Jesús, que arde con amor en el leño de la cruz, nos llama a una vida encendida en su fuego, que no se pierde en las cenizas del mundo; una vida que arde de caridad y no se apaga en la mediocridad. ¿Es difícil vivir como él nos pide? Sí, es difícil, pero lleva a la meta. La Cuaresma nos lo muestra. Comienza con la ceniza, pero al final nos lleva al fuego de la noche de Pascua; a descubrir que, en el sepulcro, la carne de Jesús no se convierte en ceniza, sino que resucita gloriosamente. También se aplica a nosotros, que somos polvo: si regresamos al Señor con nuestra fragilidad, si tomamos el camino del amor, abrazaremos la vida que no conoce ocaso. Y ciertamente viviremos en la alegría.” (Homilía el Miércoles de ceniza en la basílica de santa Sabina en Roma el día 6 de marzo de 2019)

- “Estos son los caminos que nos presentan, con la ilusión de poder alcanzar el éxito y la felicidad. Pero, en realidad, son completamente ajenos a la manera de actuar de Dios; de hecho, nos separan de Dios, porque son obra de Satanás. Jesús, enfrentando estas pruebas en primera persona, vence la tentación tres veces para adherirse completamente al plan del Padre. Y nos indica los remedios: la vida interior, la fe en Dios, la certeza de su amor, la certeza de que Dios nos ama, de que es Padre, y con esta certeza superaremos toda tentación. Pero hay una cosa, sobre la que me gustaría llamar la atención, una cosa interesante. Jesús al responder al tentador “no entra en el diálogo”, sino que responde a los tres desafíos solo con la Palabra de Dios. Esto nos enseña que con el diablo uno no dialoga, uno no debe dialogar, se le responde solamente con la Palabra de Dios.” (Angelus, día 10 de marzo de 2019)

(17.03.19)

San José. El blog “El hecho imponible” está acogido al patrocinio de María Santísima, Madre de Dios y Madre nuestra; a san José, nuestro padre y señor; y al beato Álvaro del Portillo. En homenaje a nuestro santo patrón rezamos: “¡Oh feliz varón, bienaventurado José, a quien fue concedido no sólo ver y oír a Dios, a quien muchos reyes quisieron ver y no vieron, oír y no oyeron, sino también abrazarlo, besarlo, vestirlo y custodiarlo! Ruega por nosotros, bienaventurado José. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo”

Noticia fiscal. Se ha aprobado la Ley 5/2019, de 15 de marzo (BOE del 16), de contratos de crédito. La DF 2ª añade un párrafo final al art. 45 TRLITPyAJD por el que se dice que los beneficios y exenciones subjetivas que se aprueben para la modalidad de cuota variable en documentos notariales por el IAJD no se aplicarán a operaciones en las que el sujeto pasivo se determine por el párrafo segundo del art. 29 (prestamista), “salvo que se dispusiese otra cosa”.

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