LO TRIBUTARIO (nº 716)

La buena Administración (15): El procedimiento adecuado (2)

El artículo 41 de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE (7.12.2000), establece: “1. Toda persona tiene derecho a que las instituciones, órganos y organismos de la Unión traten sus asuntos imparcial y equitativamente y dentro de un plazo razonable.”

La LGT/2003 ha multiplicado los procedimientos de aplicación de los tributos hasta tal punto que ni siquiera el legislador fue capaz de referirse y regularlos todos individualizadamente (art. 123 LGT). Así, el procedimiento de rectificación de autoliquidaciones se regula reglamentariamente (artículos 126 a 129 RD 1065/2007, RAT) a partir de lo que se prevé en el artículo 120.3 LGT y a la vista de los dispuesto en el artículo 122 LGT que, permitiendo las autoliquidaciones complementarias para tributar más, prohíbe presentar autoliquidaciones sustitutivas para tributar menos. Y, también reglamentariamente (RD 1065/2007) se regula el procedimiento de inclusión en el sistema de cuenta corriente tributaria (arts. 140 a 143), el de comprobación censal (art. 145) y el de comprobación del domicilio (arts. 148 a 142).

Esta multiplicación de procedimientos, además de que lesiona el principio de seguridad jurídica (art. 9 CE), prolongando en el tiempo la provisionalidad y la incertidumbre en la determinación de la obligación tributaria de cada contribuyente por cada concepto tributario y por cada período impositivo, exige aplicar la ley con precisión para evitar iniciar, tramitar o concluir un procedimiento que no sea el adecuado. Así, en el procedimiento de verificación de datos la Administración no puede comprobar hechos ni calificaciones, sino sólo contrastar los datos contenidos en las declaraciones con los de otra documentación en poder de la Administración o si es patente la indebida aplicación de una norma (TS ss. 2.07.18, 28.11.19, 15.10.20…); en el procedimiento de comprobación limitada la Administración no puede requerir información de movimientos financieros ni examinar la contabilidad ni comprobar rendimientos de actividad (TS ss. 13.06.14, 9-2-16…). Y en el procedimiento de inspección el alcance comunicado al inicio determina los límites temporales y de contenido de las actuaciones y de la resolución (AN s. 26.06.14…).

Prescindir absolutamente del procedimiento es causa de nulidad de pleno derecho (art. 217 LGT). Aplicar un procedimiento indebido debería ser causa de nulidad y no debería ser eficaz invocar los principios de eficacia o de eficiencia para hacer valer un procedimiento de gestión, cuando el procedente fuera el de inspección: Para comprobar los requisitos de un régimen especial -colegio profesional como entidad parcialmente exenta del IS- la actuación debe ser “inspectora” y por los órganos competentes para “inspección”; al ser un procedimiento indebido el de comprobación imitada se produjo la nulidad, contra el Abogado del Estado que defiende que es “absurdo” emplear la inspección para algo tan “sencillo” que puede comprobar Gestión (TS 23-3-21, dos). Aunque, no faltan las sorpresas: habiendo optado por reclamar ante el TEAC según permite la ley (art. 229 LGT), se ha considerado: que no es causa de anulación que resolviera un TEAR, porque es una mera incompetencia jerárquica o de función, y que no afecta al derecho a una buena Administración, la tardanza en resolver porque vulnerar ese derecho no determina nulidad (AN 4-3-21). Y, así, matizando, desaparece.

DE LO HUMANO A LO DIVINO

Hay tantos asuntos con los que no se quiere preocupar a la opinión pública que, cada poco, vuelven noticias tributarias. Como que la UE recomienda subir tipos del IVA. 

Corpus Christi. Solemnidad del Cuerpo y Sangre de Cristo. Inevitable para tantos cristianos recordar y rezar el “Adorote devote”, si es posible ante el Sagrario o ante la custodia en la Exposición del Santísimo: “Te adoro con devoción, Dios escondido, oculto verdaderamente bajo estas apariencias. A Ti se somete mi corazón por completo y se rinde totalmente al contemplarte. / Al juzgar de Ti se equivocan la vista, el tacto, el gusto; pero basta el oído para creer firmemente; creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios; nada es más verdadero que esta Palabra de verdad. / En la Cruz se escondía sólo la Divinidad, pero aquí se esconde también la Humanidad; sin embargo, creo y confieso ambas cosas, y pido lo que pidió aquel ladrón arrepentido. / ¡Memorial de la muerte del Señor! Pan vivo que das vida al hombre, concede a mi alma que de Ti viva y que siempre saboree tu dulzura. / Señor Jesús, Pelicano bueno, límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre, de la que una sola gota puede liberar de todos los crímenes al mundo entero. / Jesús, a quien ahora veo oculto, te ruego que se cumpla lo que tanto ansío: que al mirar tu rostro cara a cara, sea yo feliz viendo tu gloria. Amén”.

Así, todos los días, en especial en este día, se saborea mejor las palabras del evangelio de Juan: “Yo soy el pan de vida; el que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí no tendrá nunca sed… Este es el pan que baja del cielo, para que si alguien lo come no muera. Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo. Si alguno come este pan vivirá eternamente y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo…En verdad, en verdad os digo que, si no coméis la carne del Hijo del Hombre y no bebéis su sangre, no tendréis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo le resucitaré en el último día. Porque mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él. Igual que el Padre que me envió vive y yo vivo por el Padre, así, aquel que me come vivirá por mí. Éste es el pan que ha bajado del cielo, no como el que comieron los padres y murieron: quien come este pan vivirá eternamente” (Jn 6,35. 50-51. 53-58).

Y así los cristianos vivimos en cada misa: “Mientras cenaban, tomó pan y, después de pronunciar la bendición, lo partió, se lo dio a ellos y dijo:  - Tomad, esto es mi cuerpo. Y, tomando el cáliz, habiendo dado gracias, se lo dio y todos bebieron de él. Y les dijo: - Ésta es mi sangre de la nueva alianza, que es derramada por muchos (Mc 14,22-24).  

Del alma sale el cántico alegre y enamorado del “Pange lingua”: “Canta, oh lengua, del glorioso / Cuerpo de Cristo el misterio, y de la Sangre preciosa / que, en precio del mundo / vertió el Rey de las naciones. / Fruto del más noble seno. / Veneremos, pues, postrados / tan augusto sacramente: / y el oscuro rito antiguo / ceda a la luz de este nuevo; supliendo la fe sencilla / al débil sentido nuestro. / Al Padre y al Hijo, / gloria y vítores sin cuento; / salud, honor y poder, / bendición y gozo eterno: / y al que procede de ambos / demos igual alabanza. Amén”. Y la sentida oración: “Oh Dios que en este Sacramento admirable nos dejaste el memorial de tu pasión, te pedimos nos concedas venerar de tal modo los Sagrados Misterios de tu Cuerpo y de tu Sangre, que experimentemos constantemente en nosotros el fruto de tu Redención. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén”.  

LA HOJA SEMANAL

(del 7 al 12 de junio)

Lunes (7)

San Antonio María Gianelli, obispo (10ª TO)
Palabras: “Dichosos vosotros cuando os insulten y os persigan… (Mt 5,11)
Reflexión: … estad alegres y contentos porque vuestra recompensa será grande
Propósito, durante el día: Señor, lo que quieras, como quieras, hasta que quieras

Martes (8)

San Guillermo Fitzherbert, obispo (10ª TO)
Palabras: “Alumbre así vuestra luz a los hombres, … (Mt 5,16)
Reflexión: … para que vean vuestras buenas obras
Propósito, durante el día: Señor, dame luces para poder ser luz

Miércoles (9)

San Efrén, diácono y doctor de la Iglesia (10ª TO)
Palabras: “Antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse… (Mt 5,18)
Reflexión: … hasta la última letra o tilde de la Ley”
Propósito, durante el día: Señor, que vea; que sea como Tú quieres

Jueves (10)

San Landerico de París, obispo (10ª TO)
Palabras: “Si cuando vas a poner tu ofrenda sobre el altar te acuerdas … (Mt 5,23)
Reflexión: … de que tu hermano tiene quejas contra ti, ve primero a reconciliarte”
Propósito, durante el día: Señor que me acostumbre a pedir perdón y a perdonar

Viernes (11)

Sagrado Corazón de Jesús (San Bernabé, ap.; Nª Sª de la Capilla) (día de penitencia)
Palabras: “Al llegar a Jesús, viendo que ya había muerto… (Jn 19,33)
Reflexión: … con la lanza le traspasó el costado, y al punto salió sangre y agua”
Propósito, durante el día: Dentro de tu Corazón, dándote mis latidos de amor

Sábado (12)

Inmaculado Corazón de María
Palabras: “Mira que tu padre y yo angustiados, te buscábamos… (Lc 2,48)
Reflexión: … ¿No sabíais que es necesario que yo esté en las cosas de mi Padre?
Propósito, durante el día: Madre, ven conmigo a buscar a Jesús y mantenme junto a Él

(la reflexión y el propósito los fija cada uno, claro)

Las lecturas del día 6, domingo (Corpus Christi, ciclo B; san Marcelino Champagnat, fundador de los HH. Maristas) nos recuerdan la alianza de amor de Dios, en el éxodo del pueblo judío con Moisés y en la venida de Jesús: “Esta es la sangre de la alianza que hace el Señor con vosotros” (Ex 24); “La sangre de Cristo que en virtud del espíritu eterno, se ha ofrecido como sacrificio sin mancha” (Heb 9); “Ésta es mi sangre, sangre de la alianza, derramada por todos” (Mc 14). En el Sagrario está siempre con nosotros.

PALABRAS DEL PAPA FRANCISCO

- “En esta fiesta en la que celebramos a Dios: el misterio de un único Dios y este Dios es el Padre y el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Tres personas, pero Dios es uno! El Padre es Dios, el Hijo es Dios, el Espíritu es Dios. Pero no son tres dioses: es un solo Dios en tres Personas. Es un misterio que nos ha revelado Jesucristo: la Santa Trinidad. Hoy nos detenemos a celebrar este misterio, porque las Personas no son adjetivaciones de Dios: no. Son Personas, reales, distintas, diferentes; no son -como decía aquel filósofo- “emanaciones de Dios”: ¡no, no! Son Personas. Está el Padre, al que rezo con el Padrenuestro; está el Hijo que me ha dado la redención, la justificación; está el Espíritu Santo que habita en nosotros y habita en la Iglesia. Y este nos habla al corazón, porque lo encontramos encerrado en esa frase de san Juan que resume toda la revelación: “Dios es amor” (1Jn 4,8.16). El Padre es amor, el Hijo es amor, el Espíritu Santo es amor. Y en cuanto es amor, Dios, aunque es uno y único, no es soledad sino comunión, entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Porque el amor es esencialmente don de sí mismo, y en su realidad originaria e infinita es Padre que se da generando al Hijo, que a su vez se da al Padre, y su amor mutuo es el Espíritu Santo, vínculo de su unidad. No es fácil entenderlo, pero se puede vivir este misterio; todos nosotros; se puede vivir tanto.” (Angelus, día 6 de junio de 2021)

- “De este rápido recorrido por el Evangelio, deducimos que Jesús no sólo quiere que recemos como Él reza, sino que nos asegura que, aunque nuestros tentativos de oración sean completamente vanos e ineficaces, siempre podemos contar con su oración. Debemos ser conscientes: Jesús reza por mí. Una vez, un buen obispo me contó que en un momento muy malo de su vida y de una gran prueba, un momento de oscuridad, miró a lo alto de la basílica y vio escrita esta frase: “Yo Pedro rezaré por ti”. Y eso le dio fuerza y consuelo. Y esto sucede cada vez que cada uno de nosotros sabe que Jesús reza por él. Jesús reza por nosotros. Ahora mismo, en este momento. Haced este ejercicio de memoria repitiéndolo. Cuando hay alguna dificultad, cuando estáis en la órbita de las distracciones: Jesús está rezando por mí. Pero, padre ¿eso es verdad? Es verdad, lo dijo Él mismo. No olvidemos que lo que nos sostiene a cada uno de nosotros en la vida es la oración de Jesús por cada uno de nosotros, con nombre, apellido, ante el Padre, enseñándole las heridas que son el precio de nuestra salvación. 

Aunque nuestras oraciones fueran solamente balbuceos, si se vieran comprometidas por una fe vacilante, nunca debemos dejar de confiar en Él. Yo no sé rezar, pero Él reza por mí. Sostenidas por la oración de Jesús, nuestras tímidas oraciones se apoyan en alas de águila y suben al cielo. No os olvidéis: Jesús está rezando por mí - ¿Ahora? - Ahora. En el momento de la prueba, en el momento del pecado, incluso en ese momento, Jesús está rezando por mí con tanto amor.” (Audiencia general, 2 de junio 2021)

(6.06.21)   

Noticia del blog. El día 1 de junio se superó la cifra de 85.000 páginas visitadas desde el 30 de septiembre de 2013 en que se publicó por primera vez el blog “El hecho imponible”. En esta semana ha habido lectores desde Italia, España, Estados Unidos, Alemania, República Dominicana, Portugal y Rusia. Gracias a todos.

Noticia fiscal. Aunque el asunto no es fiscal, no cabe duda de que los cambios en el Código civil y en otras leyes que se han visto modificadas por la Ley 8/2021, de 2 de junio (BOE del día 3), sobre personas con discapacidad en el ejercicio de su capacidad jurídica, podrán afectar a situaciones y operaciones con trascendencia tributaria. 

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