LO TRIBUTARIO (nº 483)
Procedimientos tributarios (1): la gestión de los tributos
Con buen criterio, la LGT/1963, “de los maestros”, refería el concepto “gestión” a la determinación de la obligación tributaria: “La gestión tributaria corresponde privativamente al Ministro de Hacienda en cuanto no haya sido expresamente encomendada por Ley a una entidad pública” (art. 6.2). “El ejercicio de la potestad reglamentarias y los actos de gestión constituyen actividad reglada y son impugnables en vía administrativa y jurisdiccional en los términos establecidos en las Leyes” (art. 7). “Las funciones de la Administración en materia tributaria se ejercerán con separación en sus dos órdenes de gestión, para la liquidación y recaudación, y de resolución de reclamaciones que contra aquella gestión se susciten, y estarán encomendadas a órganos diferentes” (art. 90). Sólo se regulaba un procedimiento de gestión (arts. 101 a 119) que comprendía la liquidación (arts. 120 a 125) y la recaudación (arts. 126 a 139). La regulación de la Inspección de los Tributos, con sus competencias, facultades y documentación de sus actuaciones (arts. 140 a 146), no constituía un procedimiento: en el de gestión, la Inspección investigaba y comprobaba, en su caso hacía una propuesta de regularización y era el órgano competente el que dictaba el acto de liquidación.
Fue en los años setenta del siglo pasado cuando se produjo el cambio radical. Se empezó modificando el artículo 140 LGT para incluir la liquidación como competencia inspectora cuando resultaba de sus actuaciones (el órgano de gestión, que no comprobaba, quedaba vacío de funciones; la mecanización permitió iniciar la verificación de autoliquidaciones mediante “liquidaciones paralelas” por contraste de datos). Luego, creció la importancia de la Inspección y se creó, primero, el Servicio de Inspección Auxiliar y, luego, el Cuerpo de Gestión con especialidades (gestión, inspección, aduanas, contabilidad) con competencias limitadas y para ayuda en las actuaciones inspectoras.
Con la LGT/2003 se produjo la eclosión de los procedimientos, se inventó la “Aplicación de los tributos” en la que cabe todo, y allí se metieron funciones, actuaciones y procedimientos, unos dentro y otros fuera de la LGT; se separó “Gestión” de “Inspección” aunque esas mismas palabras demuestran que ésta no es más que una “actuación” de aquel “procedimiento”; y con esa desafortunada base se regulan pseudoprocedimientos, como el de inspección, en la ley (arts. 145 a 159 LGT); o, en el reglamento de aplicación de los tributos (RAT): ciertos requerimientos de información (art. 57 RAT), contestación de consultas escritas (arts. 66 a 68 RAT), rectificación de autoliquidaciones (art. 126 a 129 RAT), rectificación de declaraciones, comunicaciones y solicitudes (art. 130 RAT), reconocimiento de beneficios fiscales de carácter rogado (arts. 136 y 137 RAT), inclusión en el sistema de cuenta corriente (art. 140 RAT), rectificación censal (art. 145 RAT). Sin duda, los más llamativos son los referidos a las consultas y a ciertos requerimientos de información en los que parece imposible incluir con su verdadero significado la resolución que decide en Derecho una cuestión.
La LGT (arts. 123) relaciona los cinco procedimientos que regula a continuación. Pero, antes (arts. 117 a 122), relaciona las funciones incluidas en la Gestión Tributaria, excluyendo expresamente la inspección y la recaudación. Y así acaba la historia.
DE LO HUMANO A LO DIVINO
Una nueva aplicación en el Registro Mercantil detecta 5.000 sociedades que son socios de otras españolas. Sobre todo, con sede en Holanda, Alemania y Luxemburgo.
En el recuerdo resuena el antiguo dicho: “Hasta san Antón, pascuas son” que alargaba las fiestas navideñas hasta el día 17 de enero, que es día de memoria obligatoria de san Antonio, abad, el principal pionero de la vida monástica, que vivió entre los años 250 y 355. En la liturgia, la Navidad termina “el domingo después del 6 de enero” con la celebración de la fiesta del Bautismo del Señor. Es la primera manifestación de la Santísima Trinidad: “En un bautismo general, Jesús también se bautizó. Y, mientras oraba, se abrió el cielo, bajo el Espíritu Santo sobre él en forma de paloma, y vino una voz del cielo: - “Tú eres mi Hijo, el amado, el predilecto” (Lc 3,21-22; cf. Mt 3,17; Mc 1,11). El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, un solo Dios, todo amor. El Amor.
A muchos cristianos ese pasaje evangélico les lleva al recuerdo del “Primer canto del Siervo de Dios”, en el “libro de la Consolación”, del llamado “Segundo Isaías”: “Mira a mi siervo, a quien sostengo, mi elegido, en quien se complace mi alma. He puesto mi Espíritu sobre él: llevará el derecho a las naciones. No gritará, ni chillará, no hará oír su voz en la calle. No quebrará la caña cascada ni apagará el pábilo vacilante. Dictará sentencia según la verdad. No desfallecerá ni se doblará hasta que establezca el derecho en la tierra. Las islas esperarán su ley” (Is. 42, 1-5). Para un fiel seguidor de Cristo, sin más estudios ni preparación, este pasaje presenta a Jesús, el Hijo de Dios, en su justicia y en su misericordia para con nosotros. Él, en su justicia, lleva el derecho a la tierra, sin gritar, sin chillar, sin imponer, y dicta sentencia según la verdad, porque nada queda oculto y porque ve en el corazón de las personas; y, en su misericordia, comprende, excusa, perdona nuestros fallos y debilidades: no quebrará la caña cascada, ni apagará el pábilo vacilante. Porque “tenemos uno que abogue ante el Padre: a Jesucristo, el Justo. Él es víctima de propiciación por nuestros pecados, no sólo por los nuestros, sino también por los del mundo entero” (1 Jn 2.2)
Tampoco es precisa una especial preparación para descubrir el tiempo transcurrido desde las últimas noticias evangélicas sobre Jesús, niño, hasta el bautismo cuando ya era hombre. La Sagrada Familia, avisado en sueños José por un ángel, tuvo que huir a Egipto, antes de la matanza de los Santos Inocentes ordenada por Herodes (v. Mt 2, 13-18). La Sagrada Familia volvió de Egipto cuando, muerto Herodes, reinaba en Judea su hijo Arquelao y un ángel se apareció a José y le dijo que volviera a la tierra de Israel. De nuevo avisado en sueños, José, que temía volver a Judea, decidió ir a vivir a Nazaret en Galilea (v. Mt 19-23). Allí, el Niño iba creciendo y fortaleciéndose lleno de sabiduría y la gracia de Dios estaba en él” (Lc 2,40). Hasta el bautismo de Jesús en el río Jordán por Juan el Bautista, los Evangelios sólo recogen el episodio de la subida a Jerusalén en la Pascua cuando Jesús tenía doce años (Lc 2, 41-50). Es la vida oculta; con José y con María que “guardaba todas estas cosas en su corazón” (cf. Lc 2,51).
Silencio en los escritos. Falta de noticias. Pero son casi treinta años que nos muestran el modelo de la vida en familia: en la educación, la oración, el trabajo. Mirando a Nazaret, continuamente, hemos de aprender y practicar el buen ejemplo, el saber soportar, el disfrutar juntos, el perdonar y pedir perdón; cambiar el “yo” por el tú, por el nosotros.
LA HOJA SEMANAL
(del 14 al 19 de enero)
Lunes (14)
San Juan de Ribera, obispo (1ª TO)
Palabras: “Venid conmigo y os haré pescadores de hombres” (Mc 1,17)
Reflexión: Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron
Propósito, durante el día: Ayúdame Dios mío a ser fiel a mi vocación y estado
Martes (15)
San Mauro, abad (1ª TO)
Palabras: “Cállate y sal de él” (Mc 1,25)
Reflexión: El demonio dando un grito muy fuerte salió
Propósito, durante el día: No nos dejes caer en la tentación. Líbranos del Malo
Miércoles (16)
San Marcelo I, papa (1ª TO)
Palabras: “Se levantó de madrugada, se marchó al descampado… (Mc 1,35)
Reflexión: … y allí se puso a orar”
Propósito, durante el día: Llenar el día de oración: jaculatorias, ofrecimientos
Jueves (17)
San Antonio, abad (1ª TO)
Palabras: “Quiero, queda limpio” (Mc 1,41)
Reflexión: “Si quieres, puedes limpiarme”. Jesús sintió lástima y quedó limpio
Propósito, durante el día: Dios mío haz que sea como Tú quieres que sea
Viernes (18)
Santa Margarita de Hungría, virgen (1ª TO; Octavario por la Unión de las Iglesias)
Palabras: “Levántate, coge tu camilla y vete a tu casa” (Mc 2,11)
Reflexión: Viendo la fe que tenían los amigos del paralítico
Propósito, durante el día: Ayúdame, Dios mío, a ser buen amigo, buen compañero
Sábado (19)
Beato Marcelo Spínola (1ª TO; Octavario por la Unión de las Iglesias)
Palabras: “Al pasar vio a Leví, el de Alfeo, sentado al mostrador (Mc 2,14)
Reflexión: Le dijo: “- Sígueme”. Se levantó y lo siguió
Propósito, durante el día: Madre, ayúdame a decir sí y hacer lo que Dios me pide
(la reflexión y el propósito los fija cada uno, claro)
Las lecturas del día 13 domingo (el Bautismo del Señor; ciclo C) son una llamada a cada cristiano a seguir los pasos de Jesús, confiando en su misericordia: “La caña cascada no la quebrará, el pábilo vacilante no lo apagará” (Is 42); “La cosa empezó en Galilea… pasó haciendo el bien y curando” (Hech 10); “En un bautismo general, Jesús también se bautizó” (Lc 3). Es tiempo de empezar una nueva vida: recordar nuestro bautismo, procurar ser fieles, cumplir el mandato del amor y confiar en Dios.
PALABRAS DEL PAPA FRANCISCO
- “Hoy, hermanos y hermanas, estamos invitados a imitar a los magos. Ellos no discuten, sino que caminan; no se quedan mirando, sino que entran en la casa de Jesús; no se ponen en el centro, sino que se postran ante él, que es el centro; no se empecinan en sus planes, sino que se muestran disponibles a tomar otros caminos. En sus gestos hay un contacto estrecho con el Señor, una apertura radical a él, una implicación total con él. Con él utilizan el lenguaje del amor, la misma lengua que Jesús ya habla, siendo todavía un infante. De hecho, los magos van al Señor no para recibir, sino para dar. Preguntémonos: ¿Hemos llevado algún presente a Jesús para su fiesta en Navidad, o nos hemos intercambiado regalos solo entre nosotros?” (Homilía en la misa de la Epifanía del Señor, el día 6 de enero de 2019, en la Basílica Vaticana)
- “Orar es ahora la victoria sobre la soledad y la desesperación. Rezar. La oración cambia la realidad, no la olvidemos. O cambia las cosas o cambia nuestros corazones, pero siempre cambia. Orar es ahora la victoria sobre la soledad y la desesperación. Es como ver cada fragmento de la creación hirviendo en el "torpor" de una historia que a veces no comprendemos el porqué. Pero está en movimiento, está en camino, y al final de cada camino, ¿qué hay al final de nuestro camino? Al final de la oración, al final de un tiempo en el que estamos rezando, al final de la vida: ¿qué hay allí? Hay un Padre que espera todo y espera a todos con los brazos abiertos. Miremos a este Padre.” (Audiencia general, día 9 de enero de 2019)
Noticias de los blogs. En el blog “Por entero y sin condiciones” ya se ha incluido la monografía “La aplicación de los tributos”
En el blog “Y le seguía por el camino” ya está incorporado el cuaderno “Palabras del Papa Francisco (2018)”
(13.01.19)
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